Oihana Merino, de Lalocadelacasa, presentó ante el alcalde Agustín Valdivia, la concejala de cultura Maite Iglesias y varias mujeres tejedoras que participarán el sábado este evento tanto festivo como reivindicativo que tiene como objetivos principales:
• Crear vínculos intergeneracionales entre mujeres.
• Sacar al ámbito público aquellas disciplinas, que por asociarse a las mujeres y al espacio privado, han sido despojadas de su valor.
• Poner en valor las relaciones afectivas de cercanía para construir y tejer barrio.
• Visibilizar toda la sabiduría y savoir faire que existe detrás de las labores y honrar el incalculable valor del trabajo realizado por nuestras ancestras, en la sombra.
• Crear espacios de encuentro para generar vínculos entre vecinas y vecinos del barrio a través de una actividad lúdica y artística.
Todas las piezas tejidas ese día irán a formar parte de los más de 7 km de lazo colectivo que la entidad Madejas contra la violencia sexista de Astigarraga lleva tejiendo desde hace 8 años.
Todo este movimiento comenzó como una iniciativa local en Pasaia entre dos amigas: Oihana Merino, de Lalocadelacasa, y Blanca Caballero, desde la ONG Adinkide.
La idea fue cogiendo forma cuando contactaron con Isabel Otero del proyecto Madejas contra la Violencia Sexista y crearon alianzas para conformar el grupo motor que empezó a movilizar a grupos de mujeres y personas tejedoras. En unos pocos días, más de 30 entidades (públicas, privadas, tercer sector y ciudadanía organizada) se unieron a la iniciativa y se han ido creando 14 puntos de encuentro entre Gipuzkoa, Bizkaia y Araba.
Desde Madejas contra la Violencia Sexista se intenta cada día construir una red fuerte de mujeres. Isabel nos dice: “Sabemos que comunicarnos entre nosotras es un principio. Romper el aislamiento y el silencio son los primeros pasos. Lo hacemos desde un lugar muy sencillo, conectando con las manos y la artesanía. Tejer no es solo tejer hilos o lanas. Tejer es una palabra cargada de significado. Tejer alianzas, apoyos, recursos, proyectos, aprendizajes y relaciones con mujeres próximas a nuestros pueblos y barrios.”
Es ese acto de tejer vínculos que la ONG Adinkide lleva trabajando desde hace 4 años en Gipuzkoa, generando espacios de encuentro entre personas vecinas de todas las edades con el fin de prevenir la soledad en los barrios.
Por su parte, Oihana, de Lalocadelacasa, es una emprendedora en cuyo proyecto crea complementos artesanales y ofrece clases de ganchillo desde un enfoque terapéutico y de upcycling: “Con cada nudo que atas, en el alma, otro que desatas.”
Fuente: Ayuntamiento de Lasarte-Oria